Confiar en Dios aunque me caiga a pedazos
Versículo sobre confiar en Dios
Este es un texto para quienes sienten que ya no saben qué más hacer. A veces, confiar en Dios parece difícil, pero es lo único que sostiene cuando todo lo demás falla.
“Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia inteligencia.”
— Proverbios 3:5
Este versículo es una invitación directa a rendir el control. A veces creemos que si pensamos lo suficiente, si planeamos todo, si lo analizamos bien, vamos a lograr que las cosas salgan como queremos. Pero no siempre es así.
La vida tiene vueltas inesperadas, momentos que no entendemos y decisiones que no parecen tener sentido. Y justo ahí es donde entra la fe: cuando ya no tenemos lógica, pero aún podemos confiar.
Cuando confiar cuesta más:
Confiar en Dios no significa resignarse. Tampoco es hacer como si todo estuviera bien. Es más bien decir:
“No entiendo lo que está pasando, pero igual sigo creyendo que estás conmigo.”
Puede ser frustrante no ver resultados. Seguir orando y sentir que nada cambia. Pero la confianza no se trata de resultados inmediatos, sino de mantener la esperanza incluso cuando todo parece detenido.
Este versículo nos recuerda que nuestro entendimiento es limitado, pero el amor y la sabiduría de Dios no lo son. Y eso puede traernos paz en medio de la incertidumbre.
Oración basada en Proverbios 3:5
Señor, hay cosas que no entiendo.
Hay caminos que no elegí y situaciones que no controlo.
Ayúdame a confiar en ti, incluso cuando no todo tenga sentido.
A soltar mis cálculos y abrazar tu voluntad.
No quiero depender solo de lo que sé, sino caminar sabiendo que tú vas conmigo.
Amén.
🙏 ¿Te tocó vivir una etapa donde tuviste que confiar sin entender?
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